PAZ Y GOZO EN MEDIO DE LAS TORMENTAS.
10 de marzo, 2022.
LECTURA BÍBLICA.
Gustad, y ved que es bueno Jehová; dichoso el hombre que confía en él.
Salmos 34:8
MEDITACIÓN.
David escribió el Salmo 34 mientras huía de Saúl, rey de Israel, que por envidia lo persiguió para matarlo.
David buscó refugios, anduvo de un lugar a otro, fue astuto para obtener ayuda, fingió locura para escapar de sus adversarios. En una ocasión se escondió en una cueva donde conoció a todos los afligidos, endeudados y sufrían amargura de espíritu, éstos se juntaron con él y lo hicieron su jefe, tuvo consigo como cuatrocientos hombres. (1 Samuel 22.1-2).
En medio del peligro que vivió, David fijó su mirada en Dios, vio cómo lo guiaba, protegía, hacía ganar el corazón de la gente y aumentar el número de su ejército. Sintió el placer de conocer la bondad de Dios que lo protegió de la maldad de otros aún de la suya propia; entre sus luchas y aflicciones, la fe que recibió del Señor lo hizo superarlas, sintió el gozo y la paz de Dios al ser liberado y salir victorioso.
ORACIÓN.
Bendito Padre celestial te ruego que como David sintió tu gozo y paz en medio de sus pruebas así sea conmigo. Aumenta mi fe en Cristo Jesús mi potente Señor y Salvador, amén.
LECTURA BÍBLICA.
Gustad, y ved que es bueno Jehová; dichoso el hombre que confía en él.
Salmos 34:8
MEDITACIÓN.
David escribió el Salmo 34 mientras huía de Saúl, rey de Israel, que por envidia lo persiguió para matarlo.
David buscó refugios, anduvo de un lugar a otro, fue astuto para obtener ayuda, fingió locura para escapar de sus adversarios. En una ocasión se escondió en una cueva donde conoció a todos los afligidos, endeudados y sufrían amargura de espíritu, éstos se juntaron con él y lo hicieron su jefe, tuvo consigo como cuatrocientos hombres. (1 Samuel 22.1-2).
En medio del peligro que vivió, David fijó su mirada en Dios, vio cómo lo guiaba, protegía, hacía ganar el corazón de la gente y aumentar el número de su ejército. Sintió el placer de conocer la bondad de Dios que lo protegió de la maldad de otros aún de la suya propia; entre sus luchas y aflicciones, la fe que recibió del Señor lo hizo superarlas, sintió el gozo y la paz de Dios al ser liberado y salir victorioso.
ORACIÓN.
Bendito Padre celestial te ruego que como David sintió tu gozo y paz en medio de sus pruebas así sea conmigo. Aumenta mi fe en Cristo Jesús mi potente Señor y Salvador, amén.
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